• Soldados tayikos durante un desfile después de un ejercicio militar a nivel nacional, en Dusambé, la capital, el 22 de juliode 2021. (Foto: Reuters)
Publicada: viernes, 29 de octubre de 2021 0:27

China construirá una base para la policía de Tayikistán cerca de la frontera con Afganistán para repeler posibles asaltos del grupo Talibán.

En un contexto de preocupación por la seguridad desde el retorno de los talibanes al poder en Afganistán, China financiará la construcción de un puesto avanzado para las fuerzas policiales en un distrito tayiko fronterizo con Afganistán, han informado este jueves los medios locales.

Los medios de comunicación, citando a una fuente parlamentaria, han informado que la Cámara Baja del Parlamento tayiko aprobó dicha construcción en el distrito de Ichkachim, en la región del Alto Badajshán, fronteriza con Afganistán.

De acuerdo con la fuente que habló bajo condición de anonimato, Pekín destinó 8,35 millones de dólares para la edificación de la infraestructura; no obstante, el acuerdo no contempla la presencia de soldados del gigante asiático en la base. “Toda la construcción está financiada por la parte china. Después de la construcción, la base será transferida a la [policía] tayika”, ha dicho el funcionario.

 

Sin embargo, ni el Gobierno chino ni el tayiko han confirmado oficialmente la construcción del puesto avanzado. Cuando se le preguntó sobre los informes de la base, el portavoz de la Cancillería de China, Wang Wenbin, se ha limitado a decir a la agencia de noticias AFP : “No estoy al tanto de la situación que mencionó usted”.

Al respecto, el presidente tayiko, Emomali Rahmon, ha expresado en varias ocasiones su preocupación por la multiplicación de “grupos terroristas” en su frontera, pidiendo el mes pasado la creación de “un cinturón de seguridad fiable alrededor de Afganistán”, país que comparte más de 1300 kilómetros de frontera con Tayikistán.

Tayikistán, junto con Rusia y otros países, ha realizado diversas maniobras militares en la región fronteriza con Afganistán para evitar agresiones contra su territorio, tras la toma del poder de los talibanes el 15 de agosto.

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