“Es absolutamente esencial, en mi opinión, preservar este acuerdo para la paz y la estabilidad”, ha insistido este miércoles el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, en una conferencia de prensa.
En referencia a la actitud del presidente estadounidense, Donald Trump, de negarse a certificar el pacto nuclear con el país persa, Guterres ha destacado que todas las partes involucradas en la iniciativa “tienen derecho a emitir sus consideraciones”, si bien ha resaltado “la importancia de mantenerlo”.
La negativa de Trump a certificar el pacto, conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés), se enmarca en los intentos de su Administración —desde que llegara al poder— por romperlo o introducir modificaciones en el mismo, cuestionando el programa de misiles de Irán.
Teherán, en respuesta, ha rechazado la postura de Trump hacia el acuerdo nuclear y ha defendido el desarrollo “innegociable” de sus misiles, asegurando que tal proyecto solo persigue fines defensivos.
En línea con las “hostilidades” de Washington hacia Teherán, este mismo miércoles la embajadora de EE.UU. ante la ONU, Nikki Haley, ha llamado al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) a adoptar una postura más dura contra Irán.
Es absolutamente esencial, en mi opinión, preservar este acuerdo para la paz y la estabilidad”, insiste el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
A las declaraciones de Haley durante el debate mensual del CSNU, han respondido sus homólogos de Rusia y el Reino Unido, Vassily Nebenzia y Jonathan Allen, respectivamente, los cuales han defendido la preservación del pacto nuclear. En concreto, Nebenzia ha advertido de que Oriente Medio se verá negativamente afectado por “los intentos de desmantelar la arquitectura del programa nuclear iraní”.
Trump no cuenta con el apoyo de ninguno de los socios del acuerdo nuclear, sellado en julio de 2015 por Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) en su aspiración de romper el referido pacto.
Tal circunstancia llevará a Washington a experimentar un “aislamiento mundial”, lo cual es considerado un “logro político para Teherán”, según declaraciones del presidente persa, Hasan Rohani.
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