No creo que hoy en día haga falta formar bloques o uniones para frenar a la OTAN. No hacemos amistades para hacer frente a alguien. No tenemos intenciones bélicas, no vamos a pelear, asegura el viceministro ruso de Defensa.
Washington y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) mantienen “unas 400 bases alrededor de Rusia. Es una realidad. Es información conocida. (…) ¿qué es lo que están haciendo alrededor nuestro”, ha lamentado el alto cargo militar ruso en una conversación concedida con la emisora 'Eco de Moscú'.
Aún así, ha descartado la posibilidad de formar una alianza militar para contrarrestar el bloque militar occidental con las potencias militares regionales, sobre todo, Irán y China.
“No creo que hoy en día haga falta formar bloques o uniones para frenar a la OTAN. No hacemos amistades para hacer frente a alguien. No tenemos intenciones bélicas, no vamos a pelear”, ha subrayado.
Antonov ya dejó claro el martes que no consideraba a la Alianza occidental como un enemigo, aunque declaró que sus actividades suponen amenaza para Moscú.
Según el alto cargo ruso, la OTAN considera "cualquier medio" con el fin de "eliminar Rusia y los antiguos países de la Unión Soviética que durante siglos" tuvieron vínculos con Moscú.
En cuanto al suministro del sistema antiaéreo ruso S-300 a Irán, ha reiterado que Moscú ya no tiene restricciones internacionales para entregarlos a Teherán.
S-300 no es una arma ofensiva, es un sistema de defensa aérea. EE.UU. ya ha reconocido que el S-300 no figura en la lista prohibida de la ONU, insiste el viceministro ruso de Defensa.
“(…) S-300 no es una arma ofensiva, es un sistema de defensa aérea. EE.UU. ya ha reconocido que el S-300” no figura en la lista prohibida de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha insistido.
Para el alto funcionario castrense ruso, no tiene caso preocuparse por el suministro de “un arma defensiva” a Irán, ya que no constituye amenazas contra nadie.
El pasado 13 de abril, el presidente ruso, Vladimir Putin, firmó un decreto por el que se levantó la prohibición de la entrega de misiles S-300 a Irán.
Varios altos cargos iraníes, entre ellos el canciller Mohamad Yavad Zarif, el ministro de Defensa, Husein Dehqan y el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, Ali Shamjani, aplaudieron la decisión rusa, que ha sido tomada tras conversaciones intensas y el seguimiento continuo de las autoridades persas.
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