La cínica propaganda de los infanticidas | El Frasco, medios sin cura

Los medios de comunicación occidentales se encargaron de destacar en primera plana el caso de la familia Bibas, cuyos cuerpos fueron entregados días atrás por parte de la resistencia palestina. Una de las frases que más repitieron fue la de “conmoción mundial”, en relación al fallecimiento de dos menores israelíes. 

Lo cierto es que este caso, del cual el régimen israelí se apresuró a lanzar su propia versión (y ya veremos el porqué), expuso como pocas veces la hipocresía y la doble vara de los medios dominantes, que jamás titularon “conmoción mundial” mientras Netanyahu masacraba a miles y miles de niños con bombardeos, ataques masivos o francotiradores que les disparaban a la cabeza y al corazón, etc.

Sin embargo, ahora el régimen responsable de un flagrante infanticidio que ha sido registrado en vivo y en directo a través de las redes sociales, le pretende hacer creer al mundo que le importan la vida de los menores de edad.

Si al criminal de guerra Netanyahu, que sigue esquivando el pedido de detención por parte de la Corte Penal Internacional, realmente le interesaran los cautivos, ¿por qué decidió rechazar la entrega de los cuerpos de la familia Bibas ofrecida por la resistencia palestina en diciembre de 2023, pocas semanas después de haber denunciado que la misma había sido ultimada tras un bombardeo israelí?

Periodistas denuncian que detrás de este llamativo rechazo del que los medios casi no hablan, se esconde la abyecta intención de usar a la familia Bibas como propaganda de guerra. Esto, mientras los propios allegados a dicha familia le recriminan a Netanyahu su indolencia e inacción.

Pero además, este caso, en el que muchos de los que se “conmueven” ante la muerte de unos niños, están exigiendo al mismo tiempo la exterminación de otros, ha dado lugar al peor de los oportunismos políticos en Argentina, donde el legislador Yamil Santoro (quien admite estar financiado por el Departamento de Estado de los EEUU), aprovechó la ocasión para pedir que se retire el nombre de la calle Palestina de la ciudad de Buenos Aires. Ya queda todo más claro.  

Ademas, tuvimos el gusto hablar con Rafael Araya Masri, presidente de la Confederación Palestina Latinoamericana y del Caribe y miembro del consejo central de la OLP y del Consejo Nacional Palestino, sobre la propuesta de limpieza étnica de Trump, y sobre la réplica del horror lanzado por Israel sobre Gaza, ahora en Cisjordania.

Los medios dominantes tal vez no tengan cura, pero al menos dudemos de aquellas “píldoras” que pretenden que consumamos.

Nuevo programa de El Frasco: Medios sin cura, el programa que aborda las noticias de la semana y el rol de los medios masivos, con un toque de ironía.

day/rba