Al menos 72 palestinos han muerto en un ataque aéreo israelí contra un edificio residencial de cinco plantas en la asediada Beit Lahia, en el norte de Gaza, que, según fuentes locales, acogía a decenas de desplazados, informa la agencia de noticias palestina WAFA.
Ha detallado que reportes iniciales sugieren que el bombardeo de aviones de combate israelíes causó grandes daños al edificio, que se derrumbó, causando “un número significativo de víctimas entre civiles inocentes, incluidos niños y mujeres”.
El portavoz de la Organización de Defensa Urbana en la Franja de Gaza, Mahmud Basal, ha dicho que las personas en el complejo bombardeado pidieron ayuda, pero debido a la falta de instalaciones y la imposibilidad de acceder al lugar, no se pudieron tomar medidas.
También, ha indicado que, hasta el momento, se han encontrado los cuerpos de 40 mártires y algunos siguen desaparecidos y bajo los escombros.
A horrific massacre was perpetrated in northern Gaza. Israel bombed a building in Beit Lahiya where more than 70 displaced people were sheltering, killing scores of them, including children and women. pic.twitter.com/3qQHVmWvtq
— The Palestine Chronicle (@PalestineChron) November 17, 2024
A su vez, el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) ha denunciado esta masacre del ejército ocupante y ha remarcado que esto es la continuación del genocidio y la venganza contra los civiles palestinos indefensos.
Ha hecho un llamado a la comunidad internacional, las Naciones Unidas y los gobiernos árabes e islámicos a romper el silencio sobre estos crímenes y tomar medidas inmediatas para detener las matanzas en curso en Gaza, especialmente en el norte y también ha pedido el fin del asedio criminal y el hambre en Gaza.
This morning, genocidal #Israel bombed a building in Beit Lahiya, 70 Palestinians were sheltering. Tens of them were massacred and many of them injured or missing. pic.twitter.com/Av9EpXpp7y
— Palestine Info Center (@palinfoen) November 17, 2024
En un informe publicado el jueves, Human Rights Watch (HRW) alertó que el régimen de Israel está llevando a cabo una limpieza étnica contra los palestinos. Precisó que en el norte de Gaza, el ejército israelí ha arrasado franjas de viviendas y otras infraestructuras civiles para dejar paso a “zonas de amortiguación” y “corredores de seguridad” en todo el enclave asediado.
Durante las últimas semanas, el norte de la Franja de Gaza ha sido objeto de operaciones militares indiscriminadas del régimen sionista, que incluso han destruido hospitales. Esta zona palestina también enfrenta un asedio total que priva a la población de cualquier suministro básico. Todas estas medidas reflejan que Israel busca una limpieza étnica, mientras sigue cometiendo el delito de genocidio, pese a las denuncias.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha anunciado que unos 100 000 palestinos han sido expulsados del norte de Gaza en el último mes.
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