En un comunicado emitido el sábado, Avichay Adraee, el portavoz de las fuerzas armadas del régimen israelí, instó a los habitantes a abandonar la zona “inmediatamente por la calle Salah al-Din” hacia lo que describió como una “zona humanitaria segura”.
Se anticipa que la región, conocida como D5, se verá envuelta en una serie interminable de operaciones bélicas, ha agregado.
La reciente orden de evacuación se produce tras un devastador ataque aéreo que cobró la vida de al menos 19 palestinos en Gaza durante la noche, mientras los tanques israelíes avanzan inexorables hacia la región de Yabalia.
Por su parte, quienes residen en el norte de Gaza relatan que se ven prisioneros en sus propios hogares, mientras las fuerzas israelíes avanzan implacablemente en su incursión por la zona de Yabalia. Se afirma que las tropas armadas amenazan a los hospitales y disparan a los residentes que intentan huir.
Asimismo, el ejército ha instado a una evacuación urgente del Hospital Kamal Adwan, de acuerdo con las palabras de Mahmud Bassal, vocero de Defensa Civil. Sin embargo, tanto la dirección como el equipo médico del hospital han decidido permanecer firmes en su lugar.
El Ministerio de Salud de Gaza advierte que las intimidaciones del régimen, que busca desalojo de los hospitales en la región, representan un grave peligro para la seguridad tanto de los pacientes como del valiente personal médico que los cuida.
Las autoridades de salud en Palestina informan que, desde el inicio de la nueva ofensiva del ejército israelí el domingo, al menos 150 vidas se han perdido en Yabalia.
De acuerdo con la agencia de la ONU, encargada de velar por los derechos de los refugiados palestinos, más del 80 % de los habitantes de Gaza ha sido forzado a abandonar sus hogares debido a la intensa ofensiva israelí que azota esta región sitiada.
Las organizaciones de derechos humanos afirman que las convocatorias a evacuar son “de hecho órdenes de desplazamiento forzado que constituyen un crimen contra la humanidad según el Estatuto de Roma”.
Las autoridades sanitarias locales confirmaron que el número de palestinos muertos a causa de la ofensiva israelí desde el 7 de octubre de 2023 ha aumentado a 42 175 víctimas mortales, además de otras 98 336 personas heridas. La mayoría de las víctimas son mujeres y niños.
Según las mismas fuentes, los servicios de emergencia aún no pueden llegar a muchas víctimas y cadáveres atrapados bajo los escombros o esparcidos por las carreteras de todo el enclave devastado por la guerra, mientras las fuerzas de ocupación israelíes siguen obstruyendo el movimiento de las ambulancias y los equipos de defensa civil.
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