Según informó el martes el servicio de prisiones israelí, se trata de la cifra más alta de prisioneros bajo dicha condición desde mayo de 2008.
El órgano israelí precisó que, solo durante las últimas tres semanas, 52 ciudadanos palestinos han sido sometidos a la “detención administrativa”.
La mayoría de los 723 prisioneros palestinos bajo esta fórmula, entre los que se encuentran 11 niños, son de la Cisjordania ocupada.
En los últimos meses, las fuerzas militares israelíes han aumentado sus violentas incursiones en distintas localidades de la Cisjordania ocupada y, como consecuencia, han matado a decenas de palestinos y detenido a miles más.
El régimen de Israel es ampliamente criticado por su inhumana política de “detención administrativa”, una figura en la que se respalda para mantener a cientos de palestinos encarcelados sin cargos ni juicio por períodos renovables de manera indefinida.
Los presos palestinos a menudo recurren a huelgas de hambre para denunciar las deplorables condiciones en las cárceles israelíes. Uno de ellos es Jalil Awawdeh, quien ha cumplido ya más de 170 días sin comer y está hospitalizado por su grave estado de salud.
Pese a las presiones de las organizaciones de los derechos humanos y mientras los médicos advierten de que la vida de Awawdeh está en peligro, el tribunal supremo israelí rechazó esta semana la solicitud para ponerlo en libertad.
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