• El exsecretario general adjunto de la FIFA, Jérôme Champagne.
Publicada: viernes, 23 de octubre de 2015 10:03

El francés Jérôme Champagne, exsecretario general adjunto de la FIFA, se anuncia como candidato a la presidencia del ente rector del fútbol mundial y presenta los cinco apoyos necesarios, según ha anunciado él mismo este viernes.

Champagne, de 57 años, es el cuarto candidato declarado que dispone de los cinco apoyos requeridos después del francés Michel Platini (cuya candidatura está congelada mientras dura su suspensión de 90 días), el príncipe jordano Alí bin al-Husein y el excapitán de Trinidad y Tobago David Nakhid.

Para llevar a cabo las reformas, se necesita a alguien que conozca la institución desde el interior, lo que es mi caso. Los 11 años que pasé no son un hándicap, al contrario", ha declarado el exsecretario general adjunto de la FIFA, Jérôme Champagne.

El plazo de presentación de candidaturas termina el jueves y las elecciones de las que saldrá el sucesor del suizo Joseph Blatter se celebrarán el 26 de febrero.

Champagne estimó que el hecho de venir de dentro de la FIFA, organismo que abandonó en 2010, no era "un hándicap".

"No me avergüenzo de los años que he pasado en la FIFA", ha señalado.

"Para llevar a cabo las reformas, se necesita a alguien que conozca la institución desde el interior, lo que es mi caso. Los 11 años que pasé no son un hándicap, al contrario", ha agregado.

El príncipe jordano Ali bin al-Husein (izq.) y el presidente suspendido de la UEFA, Michel Platini.

 

"El momento es grave, se necesita una FIFA fuerte. La FIFA tiene 111 años, hizo muchas cosas buenas pero ahora ha llegado el momento de hacer reformas", ha comentado.

"Una única reforma no bastará. Esta es la razón por la que no propongo reformas sino compromisos", ha asegurado Champagne.

Entre sus prioridades figuran "adaptar la gobernanza de la FIFA a las realidades del mundo actual, aplicar los más exigentes estándares de transparencia y ética y modernizar la administración".

Blatter era presidente de la FIFA desde 1998. Ganó en mayo para un quinto mandato, que debía durar hasta 2019, pero los escándalos de corrupción que salpicaban a la FIFA le obligaron a anunciar a su cargo, apenas cuatro días después de su triunfo en las urnas

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