En la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) cuatro jóvenes mantienen una huelga de hambre en defensa de los derechos de los estudiantes universitarios.
Expuestos a toda clase de peligro e intimidación, son protegidos solo por unos cuantos colchones y frazadas. Los líquidos que ingieren son donaciones de sus propios compañeros que los acompañan en la lucha.
También se colocaron botellones para la captación de dinero para la compra de insumos que sostengan la huelga de hambre. Uno a uno otros jóvenes comparten de su dinero.
Las autoridades universitarias advirtieron que, de continuar la toma de los edificios por parte del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU), se declarara nulo el actual semestre educativo.
Diferentes organizaciones de los derechos humanos han dado su respaldo al movimiento juvenil y rechazan las amenazas de expulsión de los estudiantes.
Los jóvenes exigen una representación en el Consejo Universitario, la dotación de herramientas en todos los laboratorios del alma mater, y el despido de la actual rectora Julieta Castellanos.
Dassaev Aguilar, Tegucigalpa.
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