“El propósito de estas discusiones será garantizar que las operaciones aéreas de la coalición no son interrumpidas por una futura actividad militar rusa, para garantizar la seguridad del personal de la coalición y evitar los errores de juicio y de cálculo”, precisó el martes el portavoz del Pentágono, Peter Cook.
La medida fue adoptada un día después de que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, al término de un encuentro con su par estadounidense, Barack Obama, al margen de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), considerara posible que su país realizara ataques aéreos contra las posiciones del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en el territorio sirio.
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