Conforme declaró el martes Jorge Calvo, uno de los paleontólogos a cargo de la recuperación de las piezas, al diario local Télam, se trata de dos vértebras, de unos 200 kilos cada una, que ha sido encontrado por accidente por una joven que se encontraba en un terreno de la Universidad del Comahue.
Los restos fósiles pertenecieron a “un animal de unos 25 metros, más específicamente de un titanosaurio, un dinosaurio herbívoro de cuello largo que fue muy abundante aquí (…) hace 85 millones de años”, precisó el experto.
Una de las piezas tiene 90 centímetros de alto por 80 de largo y la otra 80 por 80, con un peso estimado de 200 kilogramos por pieza, detalló, antes de destacar que a pesar de que la zona es extremadamente fosilífera, se suelen hallar restos mucho más pequeños.
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Los restos fósiles pertenecieron a “un animal de unos 25 metros, más específicamente de un titanosaurio, un dinosaurio herbívoro de cuello largo que fue muy abundante aquí (…) hace 85 millones de años”, precisa Jorge Calvo, uno de los paleontólogos a cargo de la recuperación de las piezas.
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