Las organizaciones feministas encabezan la lista de quienes optan por la opción de APRUEBO porque opinan que la nueva Constitución garantiza sus derechos.
El sábado, miles de mujeres se congregaron en el Teatro Caupolicán de Santiago, en la capital, invitando a enterrar la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet.
La vocera del acto, Cynthia Shuffer, declaró entre la multitud que la opción de APRUEBO avanza en transformaciones sustantivas para las mujeres en Chile, entre las que mencionó la paridad, participación política, autonomía sobre sus cuerpos, una vida libre de violencia, los derechos a decidir y tener una vivienda digna.
“Este proceso constituyente nos ha involucrado a todas por igual en su construcción. Hemos visto visibilizados todos nuestros derechos, derechos por los que hemos luchado a través de los movimientos feministas, del movimiento de mujeres. Es una lucha histórica que venimos realizando en Chile por muchos años, y hoy todas las generaciones nos unimos para decir que lo aprobamos”, dijo.
Los oponentes, sin embargo, que según las encuestas son la mayoría, opinan que un solo texto no puede solucionar los problemas de fondo del país.
En el referéndum del próximo domingo, un total de 15,1 millones de chilenos decidirán si aprueban la propuesta elaborada por una convención con paridad de género —el primer órgano de este tipo en el mundo— o si mantienen el texto actual, heredado de la dictadura y de corte neoliberal.
Por ahora, el “RECHAZO” lleva la delantera en casi todas las encuestas, con cifras que llegan al 56% y una distancia del “APRUEBO” de entre 4 y 12 puntos. Sin embargo, el amplio porcentaje de indecisos de 15% puede ser decisivo. El presidente Gabriel Boric, por su parte, insiste en que el país tiene que reformar su Constitución independientemente del resultado del plebiscito de septiembre.
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