Los ejercicios militares, llamados ‘antiterroristas’, que comenzaron el miércoles, involucraron a 2500 efectivos y a más de 45 aviones de combate y helicópteros, informó el teniente general Nikolai Ignatov, citado por la agencia rusa de noticias TASS.
Las tropas ensayaron cómo tirarse en paracaídas con armamento militar en lugares desconocidos. “El principal objetivo de las unidades de paracaidistas en las partes noroccidentales es proporcionar una situación educativa en una emergencia”, según TASS.
Ignatov también expresó su profunda preocupación por el despliegue a gran escala de las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) cerca de las fronteras rusas, reiterando que Moscú contrarrestará cualquier amenaza.
El principal objetivo de las unidades de paracaidistas en las partes noroccidentales es proporcionar una situación educativa en una emergencia”, según TASS.
En los últimos meses, los países miembros de la OTAN han incrementado el número de sus efectivos equipados con las armas defensivas y ofensivas que tienen desplegadas en Europa del Este.
En Letonia hay ya desplegado un batallón de 1000 soldados estadounidenses. En Polonia y Estonia también hay, además, grupos de combate del Reino Unido y Canadá.
Moscú denuncia la expansión militar de la Alianza Atlántica cerca de sus fronteras. A su vez, Rusia ha reforzado su capacidad de defensa en el suroeste, desplegando misiles con capacidad nuclear en el enclave de Kaliningrado, que comparte fronteras con Polonia y Lituania.
Rusia resalta que la OTAN es un bloque implacablemente hostil y agresivo que trata de militarizar la zona so pretexto de contrarrestar una supuesta amenaza rusa.
Según varios analistas, la posibilidad de un conflicto militar ha llegado a un nivel sin precedentes por el despliegue de las tropas de la OTAN cerca de las fronteras rusas y la interceptación de aviones estadounidenses por parte de Rusia, entre otros actos.
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