“El desprecio de EE.UU. por la ley y la diplomacia le ha conducido al descrédito global, y amenaza la seguridad del mundo y de EE.UU.”, ha dicho el canciller de Irán, Mohamad Yavad Zarif, en un mensaje de Twitter publicado este martes.
El ministro persa de Asuntos Exteriores ha alertado que “el comportamiento ilegal de EE.UU. no debe ser el criterio por el cual se midan las normas internacionales”.
Zarif ha hecho tales declaraciones con ocasión del V.º aniversario de la fecha en la que fue firmado el acuerdo nuclear, “el mayor logro diplomático de la última década”, según ha estimado el jefe de la Diplomacia persa.
EE.UU. se retiró, en mayo de 2018, de manera unilateral, del convenio de Viena, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por siglas en inglés), firmado el 14 de julio de 2015 por Irán y el Grupo 5+1 —compuesto entonces por EE.UU., Francia, el Reino Unido, China y Rusia, más Alemania—.
En la actualidad, rodea un aura de ambigüedad el destino del PIAC después de la salida de EE.UU. y la inacción de Europa para salvaguardarlo.
De hecho, Teherán denuncia que, pese a los esfuerzos que Europa proclama hacer para salvar el acuerdo, no ha hecho nada práctico al respecto e, incluso, ha agravado la situación con medidas como la presentación de una resolución antiraní en la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).
Por todo ello, las autoridades iraníes afirman que los firmantes europeos del acuerdo nuclear están funcionando como cómplices de EE.UU. en sus sabotajes en cuanto al convenio.
Ante dichas violaciones, Irán comenzó, desde mediados de 2019, a recortar gradualmente sus obligaciones nucleares, si bien ha asegurado, una y otra vez, que todos sus pasos son reversibles, siempre y cuando las partes europeas le garanticen los beneficios económicos que le prometieron al rubricar el acuerdo.
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