El jefe de la Organización de la Energía Atómica de Irán (OEAI), Ali Akbar Salehi, ha pronunciado un discurso inaugural durante el evento, en el que también ha participado Serguei Kirienko, el director general de la compañía rusa Rosatom que construye la planta en el sur de Irán.
Salehi ha declarado que el país persa “está abriendo una nueva página” en su tendencia hacia actividades nucleares pacíficas para el sector industrial al construir las dos nuevas centrales nucleares.
Como bien ha indicado el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, el Irán independiente pueden realizar grandes trabajos junto a la poderosa Rusia (…)”, ha subrayado el jefe de la Organización de la Energía Atómica de Irán (OEAI), Ali Akbar Salehi
Asimismo, ha informado sobre la construcción de dos nuevas centrales eléctricas en el complejo de Bushehr.
“El 30% de de los equipamientos de estas nuevas unidades será producido en Irán, y la parte rusa se ha comprometido cooperar con las empresas persas activas en el sector de la mejor manera posible. La construcción de estas nuevas centrales eléctricas durará unos 10 años”, ha agregado.
Según Salehi, la construcción de estas centrales eléctricas ayudaría a Irán a abastecer sus necesidades energéticas, economizar recursos naturales para que el país pueda ahorrar "22 millones de barriles de petróleo" y evitar la transmisión de "14 millones de toneladas de contaminantes" al aire.
Ha destacado también el lugar de Irán en Asia occidental como el primer país en haber construido y ejecutado una planta de energía nuclear.
En otro punto, ha mencionado las relaciones Irán-Rusia en diferentes sectores, el energético en particular, y ha dicho que la industria nuclear iraní se ha convertido en un símbolo estratégico en las relaciones entre ambos países.
“Como bien ha indicado el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, el Irán independiente puede realizar grandes trabajos junto a la poderosa Rusia (…)”, ha subrayado.
La central nuclear de Bushehr en Irán no tiene análogos en el mundo, es una instalación única en su género.
Irán se hizo cargo oficialmente de la primera unidad de su planta pionera de energía nuclear de 1000 megavatios en Bushehr en septiembre de 2013, después de que esta planta comenzara oficialmente sus operaciones en septiembre de 2011.
En abril de 2016 el reactor fue entregado definitivamente a Irán con lo cual finalizó el proyecto de construcción. Rosatom ofrece el mantenimiento técnico al reactor y provee el combustible nuclear.
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