Fuerzas del Ejército y de los comités populares de Yemen han lanzado este domingo un misil balístico Badr-1 contra una agrupación de mercenarios del Ejército saudí en un campamento en Najran, en el sur de Arabia Saudí, matando e hiriendo a decenas de ellos, según ha informado la cadena yemení Al Masirah.
Por su parte, el portavoz de las Fuerzas Armadas yemeníes, Yahya Saree, ha anunciado que el ataque ha dejado, hasta el momento, más de 40 muertos y decenas de heridos.
También ha agregado que el lanzamiento del misil ha causado una gran confusión entre las filas de los militares saudíes y ha interrumpido el vuelo de los aviones de guerra, helicópteros Apache y aviones de reconocimiento saudíes.
Las fuerzas del Ejército y del movimiento popular Ansarolá de Yemen responden con frecuencia a las ofensivas militares de Arabia Saudí y sus aliados.
En diciembre de 2017, Saree señaló que los francotiradores yemeníes realizaron 7148 operaciones contra los mercenarios saudíes en distintos frentes de combate en 2018 y “derribaron 42 drones (aeronaves no tripuladas) saudíes”.
La monarquía árabe está a las puertas de empezar el cuarto año de guerra contra Yemen, que inició con el objetivo de restaurar en el poder al expresidente fugitivo yemení, Abdu Rabu Mansur Hadi, y hacer retroceder a Ansarolá, que goza del apoyo del pueblo yemení.
Hasta ahora esta guerra se ha saldado con más de 60 000 yemeníes muertos, en su mayoría civiles, de acuerdo con los datos publicados por el proyecto Datos sobre Localización y Acontecimientos de Conflictos Armados (Acled, por sus siglas en inglés).
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