Hamon, crítico con el giro liberal del gobierno socialista, se ha impuesto ampliamente como el candidato del partido gobernante para las elecciones presidenciales en Francia de abril, han anunciado fuentes partidarias a la agencia AFP.
Según resultados parciales, Hamon ha obtenido alrededor del 58 % de los votos frente al 42 % de su rival, el ex primer ministro Manuel Valls, han indicado estas mismas fuentes.
De esta manera, el resultado supone un duro revés para Valls, un español de nacimiento, considerado como el heredero del presidente galo, François Hollande, el mandatario francés más impopular de las últimas décadas, razón por la que renunció a presentarse a la reelección.
Ahora, Hamon tendrá tres meses para dar un impulso a su campaña cuando, según todos los sondeos, ningún candidato de izquierda superaría la primera vuelta de las presidenciales del 23 de abril. Puesto que la ultraderechista Marine Le Pen, la líder del Frente Nacional (FN) y el expremier conservador François Fillon (2007-2012) aparecen como favoritos para convertirse en mayo en el próximo presidente de Francia.
No obstante, la futura pugna presidencial podría estar muy reñida, ya que la Fiscalía francesa realiza una investigación por presunta desviación, malversación y encubrimiento de fondos públicos contra la esposa de Fillon por haber cobrado un salario por un contrato de trabajo en la Asamblea Nacional sin que exista constancia alguna de que laboró en el órgano legislativo.
Para conocer un poco más a Hamon, de 49 años, y diputado por la región parisina, se puede decir que logró centrar los debates durante las primarias socialistas en torno a su propuesta de una renta básica universal que asignaría a término a todos los franceses un ingreso de 750 euros mensuales sin condiciones.
El electo candidato socialista propone también crear un gravamen a las riquezas generadas por las máquinas para financiar la seguridad social. “Cuando un trabajador es reemplazado por una máquina, la riqueza creada beneficia principalmente a los accionistas, por lo tanto propongo que paguen un impuesto”, viene detallada en su programa.
Hamon quien es licenciado en historia quiere recortar la jornada laboral francesa a 32 horas por semana y propone una alternativa al Producto Interno Bruto (PIB) para medir el desarrollo económico de Francia.
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