En un discurso ofrecido antes de la reunión del miércoles del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre la situación en la región de Asia Occidental, la representante permanente adjunta de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Zahra Ershadi, hizo énfasis en que el pueblo sirio ha estado sufriendo uno de los mayores problemas humanitarios del mundo durante más de 10 años.
Al respecto, denunció que las sanciones unilaterales impuestas contra Siria tienen un “papel devastador” en el agravamiento de la situación humanitaria en este país y deben levantarse de forma inmediata y completa.
La titular iraní reclamó también el fin del saqueo del petróleo y la riqueza de Siria mientras denunció que el agua no debe utilizarse como arma y debe facilitarse el regreso de los refugiados y las personas desplazadas.
“La solución final es poner fin al conflicto en Siria, acabar completamente con la presencia de todas las fuerzas extranjeras no invitadas, luchar contra los terroristas y garantizar la integridad territorial, la unidad y la independencia política de Siria”, adujo Ershadi.
En este sentido, dejó en claro que como en el pasado, Irán continuará ayudando al pueblo y al Gobierno sirios a superar los desafíos que enfrentan.
La República Islámica, un aliado del Gobierno sirio en la lucha contra el terrorismo, ha asegurado en diferentes ocasiones que no tiene ningún respeto por las sanciones crueles, unilaterales y agresivas contra el país árabe, y dice que seguirá sus cooperaciones con Damasco.
Las fuerzas estadounidenses invadieron ilegalmente en 2015 el norte de Siria y se apoderaron de los campos petrolíferos del país levantino.
distintos reportes han revelado últimamente que EE.UU. tiene un nuevo plan para renovar la estructura del grupo terrorista Daesh y justificar así su presencia en Siria y varios otros países de la región, so pretexto de combatir a la banda terrorista, pero, en realidad, busca saquear las riquezas de estos países.
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