Una enorme estatua dorada del primer ministro del régimen israelí, colocada sin autorización por un artista en la Plaza Rabin de Tel Aviv, provocó el martes una gran polémica.
El escultor Itay Zalait instaló una estatua de dos metros de alto, situada sobre un pedestal de otros dos metros que causó la sorpresa de los transeúntes. Zalait atrajo la atención de decenas de personas que pasaron por la emblemática plaza dedicada a Isaac Rabin, el primer ministro laborista asesinado por un judío de ultraderecha en 1995.
El ayuntamiento de Tel Aviv, ubicado en la plaza, ordenó a Zalait que retirara la estatua, pero el Netanyahu dorado fue derribado antes de que el escultor se lo llevara, por un grupo de personas que se reunieron allí tras ser convocadas por las redes sociales para intentar "derrocar a Netanyahu".
Algunos compararon el derribo de la estatua con el famoso derribo de la estatua del exdictador iraquí, Saddam Husein.
Feels like Baghdad in Tel aviv as golden statue of Bibi is torn down pic.twitter.com/oRryiydw4a
— Eliyahu Kamisher (@Eli_DovBear) December 6, 2016
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