Ya han transcurrido 10 días de la cuarentena impuesta para los más de 3 000 pasajeros a borde del crucero Diamond Princess, que se encuentra en el puerto japonés de Yokohama. Esta situación ha obligado a Japón a poner a todos sus ocupantes en cuarentena.
El crucero había zarpado de Yokohama, el 20 de enero, y atracado en los puertos nipones de Kagoshima y Okinawa, además de en Hong Kong, donde subió un pasajero infectado que ha contagiado a los demás.
Ahora, el crucero Diamond Princess cuenta con 218 personas diagnosticadas con el nuevo coronavirus. Este barco supone el segundo punto de mayor concentración de infectados, solo por detrás de China, origen de la epidemia.
Desde el interior del navío, el capitán del Diamond Princess explicó las medidas tomadas para controlar el caso.
El Gobierno japonés explicó que no había tests de diagnóstico suficientes para controlar a todas las personas en el barco.
Actualmente solo pudieron analizar a 300 personas a bordo. Las autoridades esperan poder analizar diariamente a mil pasajeros hasta el 18 de febrero, un día antes del fin previsto de la cuarentena. El gobierno quiere recurrir a universidades y empresas privadas para enfrenta el caso.
mhn/mrg