Peter Ball, el exobispo de Lewes y Gloucester admitió haber abusado sexualmente de 18 jóvenes menores de edad, después que sus primeras víctimas le denunciaran.
Según informa la prensa local, este martes, la Fiscalía de la Corona Británica acusó formalmente a Ball, de 83 años, que a su vez se declaró culpable de dos cargos de acoso indecente relativo a dos jóvenes y una acusación de abuso de poder del cargo público que ostentaba, que se refiere al abuso sexual de 16 jóvenes en un período de 15 años a partir de 1977-1992.
El exobispo tiene estrechas relaciones con el príncipe Carlos de Inglaterra a quien ha descrito en el pasado como "un amigo leal".
El Reino Unido ha sido testigo de un incremento en los casos de acoso y abuso sexual contra menores, algunos de los cuales se remontan a los años 1950, 1960 y 1970 con la involucración de la iglesia, personalidades y políticos.
A principios de año, la Iglesia Metodista emitió una disculpa pública después de que una investigación independiente encontrase unos 2000 casos de abusos dentro de la institución, que se remontan a los años 50.
Por su parte, la jueza Lowell Goddard de Nueva Zelanda, abrió en julio formalmente una investigación independiente sobre el abuso sexual infantil ocurrido en Inglaterra y Gales.
La Iglesia Católica Romana en Escocia no se queda atrás en estas acusaciones, ya que recientemente una comisión de investigación ha pedido que se disculpe públicamente por los escándalos de los abusos sexuales ocurridos tras sus muros.
En 2013, otro caso apareció en los medios de comunicación. La Policía británica estaba investigando a un obispo por un amplio encubrimiento de abuso a menores en la Iglesia Católica del Reino Unido.
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