El magistrado Carl J. Nichols de la corte federal del Distrito de Columbia en Washington D.C. bloqueó la orden que entraría en vigor el domingo a las 23:59 (hora local), otorgando una orden judicial preliminar que el propietario de TikTok, la compañía china ByteDance, buscaba para que la aplicación permaneciera disponible en las tiendas estadounidenses.
De hecho, Nichols accedió así a la petición de los abogados de la firma china, que solicitaban un bloqueo temporal de la posible prohibición mientras las dos partes se enfrentan en los tribunales.
Sin embargo, el juez se negó “en este momento” a bloquear más restricciones que ejecutaría el 12 de noviembre el Departamento de Comercio, el cual vetaría por completo el uso de la aplicación en el país norteamericano.
Unas horas antes del fallo, Nichols celebró una audiencia en la que escuchó los argumentos del Gobierno estadounidense, presidido por Donald Trump, que alegó que TikTok es una amenaza porque recoge los datos de sus usuarios y, al ser una empresa china, debe colaborar obligatoriamente con los servicios de inteligencia del gigante asiático.
A su vez, los abogados de la aplicación china negaron que la compañía comparta datos con Pekín y, además, denunciaron que el inquilino de la Casa Blanca tiene la intención de restringir la libertad de expresión.
“Este caso es sobre la libertad de expresión y sobre la libertad de comunicación. Es algo inherente del negocio que ha sido blanco del ataque. TikTok es una aplicación, pero es mucho más. Es una versión moderna de la comunicación en la era electrónica que ha ganado popularidad especialmente en la pandemia” del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, sostuvo Alexander Berengaut, uno de los abogados.
Trump acusa a la aplicación china de desviar los datos de los usuarios norteamericanos en beneficio de Pekín. Así, con casi mil millones de clientes en el mundo, TikTok se ha convertido en la más reciente herramienta de EE.UU. para presionar a China, que ha rechazado en duros términos las acusaciones infundadas de espionaje de Trump.
El presidente norteamericano acusa a los propietarios de la aplicación mientras la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de EE.UU. dice que no hay evidencia de que Pekín utilice datos de TikTok, como alega Trump.
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