Este nuevo escándalo ocurrió el sábado en la ciudad costera de Galveston, Texas (sureste de EE.UU.) cuando la Policía local detuvo bajo sospecha de haber entrado en un edificio privado sin permiso a Donald Neely, de 43 años, quien ya se encuentra en libertad bajo fianza.
Los agentes blancos a caballo lo ataron con la soga para conducirle a la estación policial. La grabación se hizo viral en las redes sociales y provocó una gran indignación entre los internautas que compararon el suceso con la época de la esclavitud.
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Ante el rechazo generalizado, el jefe de policía de Galveston, Vernon Hale, se vio obligado el lunes a pedir disculpas por esta “vergüenza innecesaria” mientras explicó que los oficiales “no tenían malas intenciones” y que se trata de “una técnica entrenada” que en algunas situaciones es la mejor práctica.
Entendemos la percepción negativa de esta acción y creemos que es más apropiado dejar de usar esta técnica”, señaló el jefe de policía de Galveston, Vernon Hale, luego de que dos agentes a caballo ataron con una cuerda a un hombre negro esposado para llevarlo a la estación policial.
#Galveston #ElPaso #TuesdayMorning #TuesdayThoughts On the left was arrested for killing 21 people in cold blood. On the right was arrested for TRESPASSING. You see which one got the better treatment. Racism is deep in America, it is truth. Unacceptable pic.twitter.com/aq0uji2RmC
— Chrissy (@PerryJuDo4ever) August 6, 2019
No obstante, aseveró cambiar “de inmediato” esta técnica y sustituirla con otras opciones más apropiadas: “Entendemos la percepción negativa de esta acción y creemos que es más apropiado dejar de usar esta técnica”, señaló.
Hale reconoció que los oficiales podrían haber esperado una unidad de transporte para llevar al arrestado al centro policial.
El director de la organización Coalición por la Justicia del condado de Galveston, Leon Phillips, en una entrevista publicada hoy miércoles por la cadena británica BBC, denunció el comportamiento discriminatorio de la Policía y reveló que Neely sufre enfermedades mentales y que los oficiales deberían haber esperado la llegada de un vehículo sin importar cuánto tiempo duraría.
Phillips dijo que se trata de un incidente que es “difícil de hablar” como residente de Galveston, una ciudad con un pasado de esclavitud.
“Este fue un error estúpido. (…) Lo que sí sé es que si hubiese sido un hombre blanco, no hay forma de que le habrían hecho eso”, censuró mientras puso en entredicho las explicaciones del jefe de policía de Galveston, ciudad con un pasado de esclavitud.
El incidente ocurrió en el mismo día que se registró un tiroteo mortífero en un centro comercial de El Paso, en el estado de Texas, que dejó 20 muertos, entre ellos 6 mexicanos.
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La tragedia ha vuelto a hacer sonar las alarmas por el aumento de los crímenes de odio en Estados Unidos con las retóricas del presidente de este país, Donald Trump, sobre temas como el racismo, la división étnica y la histeria antimigrante, las cuales se han acentuado desde el inicio de la campaña electoral para el 2020.
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