Según informó el jueves el diario estadounidense The Hill, citando a fuentes gubernamentales, los agentes del FBI han recibido una orden del Departamento de Justicia norteamericano para examinar si los donantes de esta organización recibían apoyo del Estado.
La investigación también intenta determinar si la citada fundación cumplió con la legislación tributaria y si los ingresos exentos de impuestos de esta organización se usaron para fines personales o políticos, agregan las fuentes en condición de anonimato.
La exsecretaria de Estado estadounidense ni tampoco representantes de su fundación, no han hecho comentarios hasta el momento sobre las nuevas investigaciones en marcha.
Esta investigación se produce en momentos en que hay abierta una línea de investigación contra Clinton por el uso de un servidor privado de correo electrónico durante su estancia en el Gobierno (2009-2013).
Clinton también es acusada de negligencia en el manejo de datos clasificados por el uso de su correo electrónico privado. De los miles de correos del Departamento de Estado analizados por el FBI, 110 “contenían información clasificada”.
El sitio web de filtraciones Wikileaks publicó el año 2016 unos 30.000 correos electrónicos del servidor privado de Clinton, cuando esta era secretaria de Estado y manejaba información clasificada, así como otros 20.000 del Comité Nacional Demócrata (CND), que revelaron el trato desfavorable de los miembros del Comité a Bernie Sanders, rival de Clinton durante las primarias campañas electorales para la presidencia de EE.UU. Clinton acusó a la Inteligencia rusa de haber llevado a cabo la filtración.
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