La Fuerza Aeroespacial del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán este viernes ha puesto en marcha las maniobras en el desierto central del país persa con el disparo de masivos misiles balísticos de superficie a superficie y la realización de operaciones con aviones no tripulados (drones) bombarderos ofensivos.
Utilizando una nueva generación de misiles y drones, las fuerzas iraníes han llevado a cabo ataques combinados contra la hipotética base enemiga y han destruido todos los objetivos designados.
De hecho, tras ataque de drones desde todas las fuentes contra el escudo de misiles del enemigo hipotético, la nueva generación de misiles de clase Zolfaqar, Zelzal y Dezful han asestado duros golpes contra las bases enemigas.
Los aludidos misiles están equipados con ojivas desmontables y cuentan con la capacidad de ser guiados fuera de la atmósfera, así como la capacidad de interrumpir y atravesar el escudo antimisiles.
Estos ejercicios se han realizado con la presencia de altos mandos castrenses iraníes, incluyendo el comandante en jefe CGRI, el general de división Hosein Salami, y el comandante de la División Aeroespacial del CGRI de Irán, el general de brigada Amir Ali Hayizade, entre otros.
A principios de este mes en curso, el Ejército iraní también puso en marcha dos días de ejercicios militares “a gran escala con drones” en diferentes regiones de la República Islámica.
Tras dichas maniobras, en un artículo publicado el viernes, el portal Middle East Politics subrayó que los ejercicios pusieron de manifiesto los avances alcanzados por Irán en el campo defensivo pese a estar sometido a las severas sanciones de Estados Unidos.
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