'La última cena', de Leonardo da Vinci, es una de las interpretaciones más reconocidas de la cena de Jesús con sus 12 discípulos, pero no es la única de este tipo, comentó Taddei, quien lleva 15 años analizando las obras del famoso pintor, a Smithsonian Channel.
Taddei indica que todas las versiones anteriores de esa escena seguían la misma tradición y tenían algo en común ―aureolas―, ausentes en la obra de Da Vinci. El experto sostiene que el pintor ignoró la fórmula que representaba a Jesús y los apóstoles como santos para transmitir el mensaje de que todos ellos y, en particular Jesús, eran personas comunes y mortales.
"Creo que Leonardo nunca añadió las aureolas porque pensaba que aquellas eran personas comunes, y ese es el verdadero secreto de Leonardo", explicó el investigador italiano Mario Taddei.
"Creo que Leonardo nunca añadió las aureolas porque pensaba que aquellas eran personas comunes, y ese es el verdadero secreto de Leonardo", explicó Taddei, mencionando que en la pintura mural del convento de Santa Maria delle Grazie, en Milán, no hay nada sobrenatural.
El experto también habló de la figura cuyo papel se convirtió en centro de debate tras la publicación de la novela 'El código Da Vinci', de Dan Brown, hace más de 10 años.
Se trata del discípulo a la derecha de Jesús (o a la izquierda, según se mire), quien, según la novela, es una figura femenina ―María Magdalena― y no el apóstol Juan. A este respecto, Taddei afirma que 'El código Da Vinci' es una novela "muy bonita", pero es solo una obra de ficción.
El experto señala que Da Vinci copió las cosas principales que tenían que estar presentes en el cuadro y no duda de que la figura en 'La última cena' de Da Vinci es el apóstol Juan, quien en las versiones anteriores siempre era representado como un joven con aspecto algo afeminado.
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