En un discurso emitido hoy domingo por la televisión local Al-Masirah, Abdulmalik al-Houthi ha calificado de una “tremenda catástrofe” el ataque de los aviones de la coalición liderada por Al Saud y ha expresado sus condolencias a la nación yemení por la muerte de al menos 213 de los compatriotas en la “masacre de Saná”.
En tal contexto, el líder de Ansarolá se ha mostrado convencido de que “el régimen saudí, con la coordinación y supervisión de Estados Unidos, ha cometido los peores crímenes contra los civiles yemeníes”.
El régimen saudí, con la coordinación y supervisión de Estados Unidos, ha cometido los peores crímenes contra los civiles yemeníes”, ha indicado Abdulmalik al-Houthi, el líder del movimiento popular yemení Ansarolá.
Al-Houthi además ha destacado que la dimensión de la masacre de Saná era tan enorme que incluso ha obligado a Washington, un aliado de Riad, revisar el apoyo que brinda a la coalición que bombardea al pueblo yemení desde marzo de 2015.
Según el político árabe, la Casa Blanca, pese a su “implicación directa” en la agresión a Yemen, ha intentado demostrar que es “imparcial” en el conflicto y ahora intenta demostrar que no es un cómplice en la jornada sangrienta en Saná. Pero, adelanta Al-Houthi, de no ser por Washington, Arabia Saudí no se atrevería a atacar Yemen.
Al-Houthi ha añadido que luego de este último crimen de Arabia Saudí, a los yemeníes no les queda más remedio que reforzar la defensa y dar una respuesta más severa a los crímenes del régimen de Al Saud. El sábado Ansarolá tras convocar una manifestación en Saná, aseguró que vengará la masacre.
El expresidente yemení Ali Abdolá Saleh (1990-2012) por su parte, ha llamado la misma jornada del domingo a atacar Arabia Saudí tras el bombardeo del sábado.
En otro momento de sus declaraciones, el líder de Ansarolá ha insistido en que la economía de Yemen es el principal blanco de ataques de Riad a fin de convertir al país en una nación aún más pobre.
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