“Esperamos que los representantes de la comunidad regional e internacional que, por lo que podemos juzgar, tienen la intención de no reconocer los resultados de las elecciones en Venezuela y de fortalecer la presión económica sobre Caracas, abandonen sus planes destructivos que pueden profundizar la polarización en la sociedad”, afirma la Cancillería rusa en un comunicado publicado este lunes.
Asegura que las elecciones, celebradas el domingo, fueron un claro mensaje de la necesidad de una solución política en Venezuela “mediante el diálogo, en el marco de la legislación vigente, a través del voto popular y sin ninguna injerencia externa”.
De esta manera, denuncia la negativa de la oposición venezolana a participar en los comicios para elegir a los miembros que conformarán la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) y recurrir a las acciones violentas para obstaculizar el proceso en la jornada electoral.
Esperamos que los representantes de la comunidad regional e internacional que, por lo que podemos juzgar, tienen la intención de no reconocer los resultados de las elecciones en Venezuela y de fortalecer la presión económica sobre Caracas, abandonen sus planes destructivos que pueden profundizar la polarización en la sociedad”, afirma la Cancillería rusa en un comunicado.
“Lamentamos observar que las fuerzas opositoras no solo ignoraron el llamamiento (del Gobierno) a participar en las elecciones sino también intentaron impedirlas provocando enfrentamientos que causaron víctimas humanas”, reza la misiva.
Tras pedir a las dos partes “detener la lucha sin sentido por el poder”, la Cancillería de Rusia exhorta a preparar el terreno para que la Asamblea Constituyente pueda cumplir con su objetivo y superar los conflictos en el territorio venezolano.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, convocó el 1 de mayo la formación de la ANC con el fin de redactar una nueva Carta Magna en reacción al rechazo de la oposición al diálogo.
La iniciativa, tomada en base al artículo 348 de la Constitución, busca ampliar y proteger los derechos sociales de los venezolanos establecidos en la Carta Magna de 1999, garantizar la paz y el diálogo ante la violencia de la oposición, superar el rentismo petrolero y fortalecer la lucha contra el terrorismo.
Más de ocho millones de venezolanos, es decir 41 % del padrón, sufragaron el domingo para elegir a los integrantes de la ANC, no obstante, tanto la oposición del país suramericano como los Gobiernos de EE.UU. y varios países europeos, entre ellos España, y de la región, como Perú, Argentina, Costa Rica, Brasil, Chile y Canadá, han anunciado su negativa a otorgar validez a la Constituyente en Venezuela.
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