El presidente de Venezuela condenó el jueves en una rueda de prensa declaraciones injerencistas del Departamento de Estado estadounidense en las que se consideraba la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) como un plan de subversión de la democracia.
Según Maduro, el Departamento de Estado de Estados Unidos, “cancillería del imperialismo norteamericano”, sigue absorto en conspiraciones y creyéndose “el gobierno del mundo”, emitiendo directrices con las que pretende, de forma arbitraria, decidir las acciones que han de tomar Gobiernos de otros países.
“¿Ustedes creen que un gobierno del mundo (Estados Unidos) está facultado legal, ética y políticamente para pararse un vocero a dar órdenes a los países de Asia, África y América Latina?”, preguntó.
El presidente de Venezuela envió por ello a EE.UU. el mensaje de que el pueblo venezolano no acepta “un mundo mandado por un solo gobierno del imperio” ni se rinde a las ordenes de Washington, y exigió al país norteamericano que no interfiera en los asuntos internos de Venezuela.
¿Ustedes creen que un gobierno del mundo (Estados Unidos) está facultado legal, ética y políticamente para pararse un vocero a dar órdenes a los países de Asia, África y América Latina?”, pregunta el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
La Asamblea Nacional Constituyente es un debate en el que “no tiene nada que ver el imperialismo” y "un asunto que nos corresponde decir a los venezolanos. ¡Bienvenido el debate en Venezuela! pero imperialismo yanqui, ¡saca tus narices nauseabundas de nuestra patria amada!", agregó.
En este contexto, llamó al pueblo a defender a la soberanía nacional y recordó que la Constituyente es un espacio para el diálogo nacional con todos los sectores "para que el pueblo empoderado asuma el rumbo de la nación", lo que deja en evidencia el desconocimiento por parte del vocero norteamericano de la Constitución venezolana.
El pasado 1 de mayo, en reacción al rechazo de la oposición al diálogo y la continuación de violentas protestas, Maduro convocó a una Asamblea Nacional Constituyente para redactar una nueva Carta Magna. La convocatoria a este proceso es una iniciativa del Gobierno para poner fin a los disturbios que azotan el país desde hace dos meses por las protestas violentas de la oposición.
tmv/mla/ftm/nal