El Gobierno de Venezuela, a través de su canciller, Delcy Rodríguez, ha pedido este miércoles a la nueva Administración estadounidense de Trump, relaciones de respeto en respuesta a las acciones injerencistas del encargado de negocios de EE.UU. contra autoridades venezolanas.
“Nosotros pedimos a los Estados Unidos, sea cual fuese su administración, relaciones de respeto, mediante el diálogo democrático, mediante el diálogo político que es lo que corresponde”, ha aseverado la canciller venezolana en una rueda de prensa desde la Casa Amarilla en Caracas (capital venezolana).
Nosotros pedimos a los Estados Unidos, sea cual fuese su administración, relaciones de respeto, mediante el diálogo democrático, mediante el diálogo político que es lo que corresponde”, ha aseverado la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez.
Rodríguez ha destacado que Venezuela actúa según los principios y propósitos diplomáticos establecidos en la Carta de las Naciones Unidas, y ha agregado que la República Bolivariana asume como principio fundamental la igualdad soberana de los Estados como principios de responsabilidad y respeto internacional que se deben las naciones del mundo.
La canciller ha pedido, asimismo, al Gobierno norteamericano no cometer los mismos errores de los gobiernos anteriores: “la era Bush marcó un fracaso en los EE.UU. sobre la política hacia Venezuela”, ha subrayado.
Sobre el expresidente Barack Obama ha indicado que “sus intentos por derrocar” al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, “fueron infructuosos”, para luego agregar que las acciones injerencistas realizadas desde el norte no han podido con la voluntad y la fuerza del pueblo venezolano.
El lunes, el Departamento estadounidense del Tesoro incluyó al vicepresidente venezolano, Tareck El Aissami, en una lista de personas y organizaciones ligadas al narcotráfico por, supuestamente, estar implicado en el envío de droga a México y Estados Unidos cuando fue ministro del Interior (2008-2012) y gobernador del estado de Aragua (2012-2017).
El Aissami, en el cargo de vicepresidente de Venezuela desde comienzos de este año en curso, respondió a la medida estadounidense a través de su cuenta en Twitter, donde afirmó que ante la “infamia y agresión imperialista su moral está intacta".
Entre tanto, el Gobierno venezolano acusa a Washington de realizar una campaña de desestabilización mediante agresiones mediáticas, complots financieros y económicos en apoyo de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en contra de Maduro.
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