La República Bolivariana de Venezuela a través de su canciller, Delcy Rodríguez, ha rechazado enérgicamente este viernes las declaraciones del portavoz del Departamento de Estado estadounidense, John Kirby, que manifestó el jueves “preocupación” por la realización del referendo revocatorio contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
En una serie de mensajes en la red social Twitter, Rodríguez ha asegurado que EE.UU. "vulnera ampliamente" el derecho internacional público "con su intromisión" en los asuntos de Venezuela y ha calificado de “intromisión inaceptable” las declaraciones de Kirby, quien cuestionó la decisión del Poder Electoral venezolano de convocar a finales de octubre el proceso de recolección de firmas para la activación del referendo revocatorio presidencial.
Los poderes públicos en Venezuela son autónomos, independientes y soberanos, pues no responden a pretensiones ni a órdenes imperiales”, escribió en su cuenta de Twitter la canciller venezolana, Delcy Rodríguez.
La ministra de Relaciones Exteriores, quien se encuentra en Nueva York representando a Maduro en la Asamblea General de la ONU (AGNU), ha exigido al Gobierno estadounidense “respeto y apego absoluto” al derecho internacional.
Asimismo, ha reiterado a Washington que "los poderes públicos en Venezuela son autónomos, independientes y soberanos, pues no responden a pretensiones ni a órdenes imperiales”, y ha dicho que “un mal ejemplo de democracia y procesos electorales viciados es el sistema que tiene Estados Unidos”.
Kirby afirmó ayer en un comunicado que los anuncios del Consejo Nacional Electoral (CNE), las “restricciones” a la prensa y acciones contra Parlamento de mayoría opositora “privan a los ciudadanos venezolanos de la oportunidad de diseñar el futuro de su país”. El portavoz instó además al Gobierno de Maduro a “comprometerse en un diálogo serio tanto con la oposición como con los venezolanos de todo el espectro político”.
El CNE aprobó esta semana el cronograma para realizar la recolección del quórum mínimo de 20% de manifestación de voluntad para la activación del mecanismo referendario solicitado por el conglomerado de partidos de oposición que compone la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
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