En una reunión mantenida este lunes con la Junta Directiva de la Cámara de Comercio Conjunta Sirio-Iraní, Husein Arnus ha propuesto desarrollar el mecanismo necesario para fortalecer las relaciones económicas con el país persa, especialmente en el sector de exportaciones, con el objetivo de abastecer las necesidades básicas del mercado y el sector de salud, en momentos en que se lucha para frenar la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.
El premier sirio ha instado a ambos lados de la Cámara a aunar esfuerzos para ampliar las inversiones conjuntas destinadas a la reconstrucción del país levantino y la rehabilitación de las fábricas y zonas industriales afectadas por la crisis en la que está envuelta Siria desde 2011.
Al respecto, Arnus ha prometido apoyar a la Cámara a organizar ferias conjuntas y lograr acuerdos de cooperación para asegurar el comercio entre los dos países de manera que se ayuden a enfrentar el bloqueo económico que enfrentan ambos socios, según recoge la agencia siria oficial de noticias SANA.
Washington, bajo la denominada Ley Cesar, ha establecido fuertes sanciones jamás impuestas a Siria. La Unión Europea (UE), por su parte, comenzó a adoptar embargos contra Siria en 2011 y, desde entonces, ha establecido varias tandas de sanciones al país árabe bajo diferentes excusas, como supuestas violaciones de los derechos humanos o el uso de armas químicas por el Ejército sirio; acusaciones que Damasco rechaza.
El Gobierno sirio ha denunciado que los embargos afectan directamente al pueblo sirio, en particular, en la lucha contra la pandemia de la COVID-19, y bloquean la reconstrucción del país, devastado por la guerra.
Además, Damasco subraya que las sanciones estadounidenses buscan propagar la hambruna en el país para someter al Gobierno sirio, pero asegura que esas medidas hostiles jamás lograrán romper la resistencia y la voluntad del pueblo y el Ejército sirios para salvaguardar la soberanía de su país.
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