En dos cartas enviadas este jueves al secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, y al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), la Cancillería siria ha denunciado los crímenes de guerra y de lesa humanidad cometidos por la coalición liderada por Estados Unidos en sus ataques en el suelo sirio.
En las misivas, recogidas por la agencia local SANA, el Ministerio de Exteriores de Siria alude, en particular, el ataque con fósforo blanco perpetrado el miércoles por la coalición, encabezada por los estadounidenses, contra zonas residenciales en la provincia de Deir Ezzor (este).
Un día antes, aviones de combate de dicha coalición bombardearon una zona en la ciudad siria de Markada, al sur de la provincia de Al-Hasaka, causando la muerte de varios civiles.
Del mismo modo, dicha Cartera siria lamenta que los países miembros de la referida coalición —“que afirman respetar los derechos humanos y el derecho internacional”— cooperan con Washington, un país que viola los derechos humanos.
(Siria) pide a esos países (…) que se retiren de esta coalición que ha estropeado la reputación de esas naciones, y que en sus nombres, ha derramado la sangre de muchos sirios”, se lee en las misivas de la Cancillería siria a la ONU.
“(Siria) pide a esos países (…) que se retiren de esta coalición que ha estropeado la reputación de esas naciones y que, en sus nombres, ha derramado la sangre de muchos sirios”, se lee en las cartas.
La Cancillería siria cierra sus misivas pidiendo al CSNU que tome “medidas inmediatas” para detener los “crímenes bárbaros” y “graves violaciones” de derecho internacional cometidos por la coalición.
Cabe mencionar que según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), los bombardeos de la llamada coalición de EE.UU., que opera en Siria sin la autorización de Damasco, han asesinado a al menos 2800 civiles, entre ellos 615 menores y 443 mujeres, en las provincias de Alepo (noroeste), Al-Raqa, Al-Hasaka y Deir Ezzor.
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