“Los aviones turcos llevaron a cabo una amplia ofensiva contra una base que alberga un centro de comunicaciones e instalaciones militares” en una localidad ubicada en el noreste de Siria, cerca de la frontera con Turquía, han denunciado las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG, por sus siglas en kurdo).
Esta milicia kurda, aliada de Estados Unidos en Siria, aun no ha ofrecido un balance preciso del número de víctimas, si bien ha confirmado en un comunicado que el bombardeo no minará su “determinación” a continuar luchando contra el terrorismo.
Los aviones turcos llevaron a cabo una amplia ofensiva contra una base que alberga un centro de comunicaciones e instalaciones militares” en una localidad en el noreste de Siria, cerca de la frontera con Turquía, han denunciado las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG, en kurdo).
Por su parte, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), con sede en el Reino Unido, ha reportado al menos 18 muertos: tres responsables de prensa de las YPG y 15 combatientes.
El Ejército turco ha confirmado sus ataques aéreos, señalando que tenían por blanco a miembros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK, por sus siglas en kurdo) en el norte de Irak y el noreste de Siria, sin ofrecer un balance de bajas en estas incursiones.
En su comunicado, las Fuerzas Armadas de Ankara precisan que los blancos se hallaban ubicados en la región iraquí de Sinyar, según ha recogido el diario turco Hürriyet. “Las operaciones continuarán con la misma determinación hasta que sea neutralizado el último terrorista”, sostiene la nota.
La región semiautónoma del Kurdistán iraquí ha condenado los bombardeos calificándolos de “inaceptables”.
El Gobierno turco ha recrudecido sus ofensivas contra la guerrilla separatista PKK, tanto en el país como en el norte de Irak y Siria, desde que se rompiera la tregua entre ambas partes en julio de 2015. Ankara considera que las YPG son la filial siria del PKK, formación catalogada de terrorista en Turquía.
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