• Bashar al-Asad, presidente de Siria.
Publicada: martes, 13 de septiembre de 2016 17:12

El presidente sirio Bashar al-Asad emitió un mensaje a las fuerzas de guerra israelíes al derribar sus aviones en Siria: ‘Yo estoy aquí en Siria y no quiero abandonarla’.

Así ha dicho el diario israelí Maariv en su edición de este martes, donde reconoce también que el incidente demuestra que si el ejército del régimen de Israel reacciona una vez más contra el disparo de proyectiles en los altos de Golán, “el Ejército de Siria no tiene las manos atadas para responder”.

Al-Asad puso así punto final a la primera ronda de la nueva fase de diálogos entre Siria e Israel. Esta vez los misiles pasaron cerca de los aviones, pero nadie sabe qué ocurrirá en otra ocasión”, cuestiona el periódico israelí.

Al-Asad así puso punto final a la primera ronda de la nueva fase de diálogos entre Siria e Israel. Esta vez los misiles pasaron cerca de los aviones, pero nadie sabe qué ocurrirá en otra ocasión”, conforme al periódico israelí Maariv .

Hoy martes, el Ejército sirio ha dicho haber derribado un avión de guerra y un dron de reconocimiento de la fuerza aérea israelí, después de que atacaran una de sus posiciones en el sur del país árabe.

Las fuerzas de guerra del régimen de Tel Aviv han desmentido de inmediato el derribo de sus aviones en Siria, señalando que las fuerzas sirias sí lanzaron dos misiles durante la incursión aérea israelí, pero que fallaron.

 

Una fuente militar siria ha informado de que el Ejército de Siria ha desplegado esta misma tarde un gran convoy de militares en los altos de Golán, luego de que la fuerza aérea del régimen israelí atacara anoche sus posiciones en la zona.

Una pequeña unidad de soldados se desplegó además en el norte del campo de Daraa, en el sur del país, añadió la fuente.

Los altos de Golán, zona de Siria ocupada por el régimen de Israel desde 1967, son escenario de tensión desde el inicio en 2011 de la crisis siria. En reiteradas ocasiones, el régimen israelí ha violado el espacio aéreo sirio para llevar a cabo bombardeos.

Dichos ataques, según los analistas, están destinados a debilitar al Ejército sirio, dado que hay pruebas de la cooperación entre el régimen israelí y grupos terroristas como el Frente Fath al-Sham (antiguo Frente Al-Nusra), que luchan para derrocar al Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad.

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