Durante una reunión con representantes del Consejo de Paz de EE.UU. (USPC, por sus siglas en inglés), encabezada por Henry Lowendorf, el mandatario afirmó el jueves que la política estadounidense en el Oriente Medio, con su tendencia a una violencia cada vez mayor, en contra de la razón y la lógica, está en contradicción con los intereses del pueblo de EE.UU. y el mundo entero, informa la agencia oficial siria SANA.
Al-Asad recalcó que EE.UU. debe, como superpotencia, desempeñar un papel positivo en el mundo, en vez de sembrar el caos y destruir y asediar países.
El papel de EE.UU. como una superpotencia debe ser positivo y basado en la promoción del conocimiento, la ciencia y la tecnología en lugar de caos y destrucción", explicó el presidente de Siria, Bashar al-Asad.
"El papel de EE.UU., como superpotencia, debe ser positivo y estar basado en la promoción del conocimiento, la ciencia y la tecnología, en lugar del caos y la destrucción", consideró.
Al-Asad subrayó que la crisis siria, que se ha convertido en una guerra contra el pueblo sirio, hunde en realidad sus raíces en el rechazo de Siria a someterse a los programas del imperialismo para la región.
Por su parte, la delegación estadounidense recalcó como objetivo de su visita examinar de cerca la situación siria, así como realizar todo esfuerzo posible para detener la guerra contra el país árabe y la injerencia norteamericana y occidental en sus asuntos.
En este sentido, los miembros de la delegación reiteraron su rechazo al belicismo y la injerencia de la Administración estadounidense en los asuntos internos de otros países, especialmente Siria, y manifestaron su determinación de cambiar esa política.
En línea con su objetivo de derrocar el Gobierno de Bashar al-Asad, Washington apoya a distintos grupos opositores armados en Siria, algunos de los cuales han secundado abiertamente a grupos terroristas, llegando incluso algunos de sus miembros a convertirse en líderes del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe).
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