• Marines de EE.UU. disparan un misil antitanques FGM-148 Javelin durante un ejercicio militar, 15 de diciembre de 2016.
Publicada: martes, 26 de diciembre de 2017 14:49
Actualizada: martes, 26 de diciembre de 2017 15:25

El vicecanciller ruso, Grigori Karasin, advierte de que las armas letales que EE.UU. entregará en breve a Ucrania podrían terminar en manos terroristas.

“¿Qué garantías tienen Washington y Ottawa de que sus armas letales no terminarán en otras manos, por ejemplo de los terroristas?”, ha lamentado Karasin en una entrevista publicada este martes por la agencia rusa de noticias Sputnik.

La preocupación del diplomático ruso se pone de manifiesto después de que el Departamento de Estado de EE.UU. anunciara el viernes los planes de Washington de suministrar a Kiev armas para reforzar la capacidad defensiva del país europeo ante la “agresión rusa”.

A su vez, el Gobierno canadiense también ha anunciado recientemente que incluirá a Kiev en la Lista de Control de Armas de Fuego Automáticas (AFCCL, por sus siglas en inglés), lo que permitirá a las empresas del país norteamericano exportar, al país europeo, armas de fuego prohibidas.

El vicecanciller ruso ha expresado, asimismo, la posibilidad de que los “emprendedores ucranianos” revendan las municiones a los grupos terroristas que operan en Oriente Medio.

¿Qué garantías tienen Washington y Ottawa de que sus armas letales no terminarán en otras manos, por ejemplo de los terroristas?”, dice el vicecanciller ruso, Grigori Karasin.

Tras llamar a Washington y a Ottawa a analizar las consecuencias potenciales de su estrategia, Karasin ha alertado de que los suministros de armas letales a Ucrania podrían internacionalizar y avivar las llamas de la crisis en la región.

El diplomático ruso ha asegurado, además, que los efectivos estadounidenses y canadienses, junto a otros miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que están desplegados en Ucrania, se consideran partes participantes en la crisis de la región de Donbás (este de Ucrania).

El cambio de facto en la política de la Casa Blanca podría intensificar las tensiones entre EE.UU. y Rusia. El expresidente de EE.UU. Barack Obama había considerado enviar armas al Ejército ucraniano, pero no llegó a proporcionar armas pesadas directamente. Por su parte, Donald Trump, el sucesor de Obama, se enfrentó a duras críticas por el hecho de ser blando con Rusia en medio de las acusaciones de que la supuesta interferencia rusa ayudó a su victoria en las elecciones estadounidenses de 2016.

La crisis ucraniana estalla entre los independentistas ucranianos y el Ejército tras el derrocamiento de Víktor Yanukóvich a través de un golpe de Estado en 2014. Hasta el momento, más de 10.000 personas han muerto en el conflicto, conforme a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

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