“Ahora el mundo ha cambiado y los estadounidenses tratan de inclinar de nuevo la balanza a su favor”, afirmó el lunes el jefe del Comité de Relaciones Internacionales del Consejo de la Federación de Rusia, Konstantín Kosachev.
Con estas palabras, el alto diputado ruso se refería a la nueva Estrategia de Seguridad Nacional presentada el mismo lunes por la Casa Blanca, en ella se estipula el uso de la fuerza para conservar la paz y aumentar la influencia de Washington, y se califica a Rusia y a China de enemigos supremos, pues “desafían el poder, la influencia y los intereses” de EE.UU.
Según el senador ruso, con este nuevo plan, Washington pretende reforzar el flanco oriental de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), poco importa que tal medida viole “las restricciones que impiden desplegar importantes contingentes militares en Europa del Este”, con lo que “EE.UU. amenaza a todo el mundo”.
Kosachev señaló que la nueva estrategia demuestra que los cambios acaecidos en el mundo en los últimos años no son del agrado de EE.UU., así que trata de restablecer la mal llamada “Pax americana” (el dominio militar y económico de Washington) como “un orden mundial supuestamente equitativo”.
Ahora el mundo ha cambiado y los estadounidenses tratan de inclinar de nuevo la balanza a su favor”, advierte el jefe del Comité de Relaciones Internacionales del Consejo de la Federación de Rusia, Konstantín Kosachev.
A su vez, el jefe del Comité de Asuntos Internacionales de la Duma Estatal de Rusia, Leonid Slutski, explicó que pretenden “revivir la hegemonía de EE.UU. y construir un mundo unipolar”.
La nueva estrategia consta de cuatro pilares: preservar la paz mediante el uso de la fuerza, aumentar la influencia de Washington, proteger la patria y el estilo de vida estadounidenses y promover su prosperidad.
En un discurso ofrecido para presentar el documento, Trump, además, volvió a cargar contra el acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Irán y el Grupo 5+1(EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) y calificó a Corea del Norte de “amenaza” real.
mjs/nii/