"Este programa se convertirá en el instrumento más importante de la implementación de la política militar y técnica de Rusia en el ámbito de la defensa y la seguridad hasta 2025 y dentro de una perspectiva más amplia", ha declarado este miércoles el presidente ruso, Vladimir Putin, en una reunión sobre la redacción de un programa de armamento de las Fuerzas Armadas para 2025.
Este nuevo plan, ha explicado el mandatario, deberá proporcionar un desarrollo equilibrado de los sistemas de armamento de todos los cuerpos militares, para luego equipar gradualmente a las unidades y las formaciones.
Esto contribuirá a aumentar considerablemente el potencial de combate de las Fuerzas Armadas y asegurar el cumplimiento de las responsabilidades y tareas estipuladas por la doctrina militar y la estrategia de seguridad nacional, asegura Putin.
Las medidas previstas, ha añadido, ayudarán a modernizar los sistemas armamentísticos y el hardware militar, tanto del Ejército de Tierra como de la Marina, además de dar la posibilidad de sentar las bases para desarrollar nuevos tipos de armas.
En el proceso de elaboración e implementación del nuevo programa estatal de armamento, "se debe prestar atención al hecho de que los planes que se han trazado se implementarán en condiciones de sustitución de importaciones", ha explicado Putin.
Este programa (un nuevo programa estatal de armamento para 2018-2025) se convertirá en el instrumento más importante de la implementación de la política militar y técnica de Rusia en el ámbito de la defensa y la seguridad hasta 2025 y dentro de una perspectiva más amplia", ha anunciado el presidente ruso, Vladimir Putin.
Este programa de sustitución de importaciones, subrayó, está siendo implementado activamente y ya ha dado "buenos resultados", aunque según Putin aún queda mucho por hacer.
Algunos expertos señalan que los constantes esfuerzos que ha llevado a cabo Putin desde 1999 para modernizar y reorganizar el Ejército ruso han dado sus frutos.
En diciembre pasado, el laboratorio de ideas Centro Carnegie de Moscú consideró que la reforma militar ha dado a Rusia, al Kremlin y a Putin un instrumento útil de política exterior que no tuvo Rusia durante un cuarto de siglo, y aseguró que el nivel de aumento de armas en el arsenal ruso es inédito desde la época soviética.
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