“A pesar de los complicados complots y amenazas del frente sionista-estadounidense en la región, Palestina seguirá siendo la causa principal del mundo del Islam y ninguna persona ni país podrá desviar a los musulmanes de este camino”, ha afirmado este viernes a través de un comunicado el portavoz del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Bahram Qasemi.
La nota se publica en reacción a la postura proisraelí del canciller bahreiní, el sheij Jalid Bin Ahmad Al Jalifa, quien ha definido la cuestión de la ciudad palestina de Al-Quds (Jersusalén) como “un asunto secundario”.
En un tuit publicado el jueves, el ministro de Exteriores bahreiní minimizó la importancia de Jerusalén para el mundo musulmán al considerar “inútil” enfrentarse a Washington por su decisión de designar Al-Quds como “capital” del régimen israelí, anunciada a través del inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump.
A pesar de los complicados complots y amenazas del frente sionista-estadounidense en la región, Palestina seguirá siendo la causa principal del mundo del Islam y ninguna persona ni país podrá desviar a los musulmanes de este camino”, ha afirmado el portavoz del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Bahram Qasemi.
“Es muy lamentable que un Estado árabe islámico” tache la cuestión de Al-Quds de “secundaria”, ignorando “siete décadas de profundas heridas que han sufrido los musulmanes”, ha censurado Qasemi.
El jueves, la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) dio un no rotundo a la decisión de Washington sobre la ciudad palestina, con 128 votos a favor de una resolución presentada por Turquía y Yemen que tiene como objetivo desbaratar la controvertida medida estadounidense.
Este apoyo internacional se cosecha pese a las amenazas de Trump y el primer ministro del régimen de Israel, Benyamin Netanyahu, a los países que votasen a favor del proyecto de resolución en la AGNU.
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