El presidente del Parlamento de Irán (Mayles), Ali Lariyani, ha mantenido un encuentro con el presidente del Presidium de la Asamblea Popular Suprema de Corea del Norte, Kim Yong Nam, en el que el titular iraní ha expresado su esperanza de que la paz y la seguridad reinen en el mundo lo antes posible.
"Un estado de caos en el mundo no será beneficioso para ningún país y perjudicará a todos (…) Las armas nucleares son perjudiciales para todos los países y la República Islámica apoya (el uso) de la energía nuclear pacífica", ha señalado Lariyani.
En concreto, el alto cargo iraní ha hecho alusión a la escalada de tensión en la península coreana luego de que el 28 de julio pasado Pyongyang realizó el lanzamiento de su segundo misil balístico intercontinental, que según las autoridades norcoreanas, tenía la capacidad de alcanzar todo el territorio estadounidense.
En respuesta a la prueba misilística de Pyonyang, Washington ha desplegado dos bombarderos estratégicos B-1B cerca de la península coreana en unas maniobras aéreas conjuntas con Corea del Sur y Japón, además de haber realizado una prueba de su sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud (THAAD, por sus siglas en inglés).
Un estado de caos en el mundo no será beneficioso para ningún país y perjudicará a todos (…) Las armas nucleares son perjudiciales para todos los países y la República Islámica apoya (el uso) de la energía nuclear pacífica", ha señalado el presidente del Parlamento de Irán, Ali Lariyani.
A su vez, el jefe parlamentario norcoreano ha subrayado que Pyongyang y Teherán comparten un enemigo común, es decir Estados Unidos, país que, a su juicio, sigue y seguirá con su política de intimidación.
Tanto Irán como Corea del Norte y Rusia han sido objeto de nuevas sanciones de Washington. En el caso específico de Irán, el Gobierno del país persa ha denunciado las nuevas restricciones promulgadas el miércoles por la Administración de Donald Trump.
La República Islámica denuncia que esta nueva muestra de hostilidad estadounidense viola los artículos 26, 28 y 29 del acuerdo nuclear sellado entre Teherán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Rusia, Francia y China, más Alemania), asimismo, confirma que tiene una “amplia gama de opciones” para responder a los actos subversivos del Gobierno estadounidense en su contra.
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