En una entrevista con la radio francesa Europe 1, Ahani ha dejado claro que a diferencia de los países de la llamada coalición anti-EIIL (Daesh en árabe), liderada por EE.UU., Irán no tiene intención de participar militarmente en la lucha contra los grupos terroristas en Siria.
“No somos miembros de esta coalición porque creemos que algunos de sus miembros no son serios y sinceros en su lucha contra el terrorismo”, ha especificado.
A continuación, en reacción ante las declaraciones del primer ministro de Francia, Manuel Valls, quien habló del presidente sirio, Bashar al-Asad, como un “carnicero”, ha pedido que el Gobierno galo adopte una postura más realista y basada en datos verificables sobre la crisis de Siria.
“Irán continuará apoyando a Bashar al-Asad, ya que es apoyado por el pueblo sirio. Todos tenemos que pensar en este país y no despedazarlo”, ha concluido.
La postura a la que ha aludido el político persa, trata de las duras críticas lanzadas el 26 de febrero del 2015 por Valls, contra los legisladores galos que habían viajado a Damasco para reunirse con el mandatario sirio.
Desde el inicio de la crisis siria en 2011, Francia ha sido uno de los principales patrocinadores de los grupos armados en el país árabe y ha insistido en la salida del poder de Al-Asad.
Aun así, no se descarta que los países occidentales den un giro político respecto al Gobierno sirio casi cuatro años después de que fracasaran por un lado los complots encaminados al derrocamiento de Al-Asad y por otro se reforzaran grupos takfiríes como EIIL gracias al apoyo del Occidente- y que actualmente amenazan la seguridad de sus propios patrocinadores.
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