En un informe publicado el viernes con motivo del segundo aniversario del inicio de la ofensiva sin precedentes del régimen de Israel contra la Franja de Gaza, Amnistía Internacional (AI) recordó el brutal asesinato de cuatro niños palestinos en una playa del enclave costero el 16 de julio de 2014, así como otro “ataque implacable contra civiles” registrado el 1 de agosto en Rafah (sur).
En su documento, que incluye entrevistas con los familiares de las víctimas mortales, AI critica, asimismo, la falta de rendición de cuentas por los crímenes de guerra cometidos durante la agresión israelí. Para la organización no gubernamental (ONG), la impunidad de la que gozan los responsables de las violaciones es “indefendible”.
Las escuelas, los centros médicos, las redes de distribución de agua, granjas, empresas a lo largo de la Franja fueron severamente dañados y destruidos”, y “más de 18.000 hogares en el enclave costero fueron destruidos sin posibilidad de reparación” denuncia Amnistía Internacional.
“Las escuelas, los centros médicos, las redes de distribución de agua, granjas, empresas a lo largo de la Franja fueron severamente dañados y destruidos”, y “más de 18.000 hogares en el enclave costero fueron destruidos sin posibilidad de reparación”, lamentó el texto, según recoge el portal de noticias Middle East Monitor.
La oenége además consideró poco “transparente e ineficaz” el proceso de investigación puesto en marcha por el ejército del régimen israelí contra los crímenes cometidos por sus soldados durante la agresión.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reportó el mismo viernes que 900 palestinos heridos en Gaza todavía esperan atención médica, mientras que más de 300 mil niños sufren problemas psicosociales derivados de los ataques israelíes.
Entre julio y agosto de 2014, el régimen israelí lanzó una campaña de ataques aéreos contra la Franja de Gaza, una agresión que duró 51 días, y dejó al menos 2310 palestinos muertos, en su mayoría civiles, de acuerdo con cifras oficiales palestinas.
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