Los asesinatos de familias enteras en Tamaulipas, Oaxaca y Guerrero, reflejan la gravedad de la violencia que se vive en México. Los ejecutores no se detuvieron ante la presencia de niños y mujeres inocentes. En Ciudad Victoria, la capital Tamaulipeca, cinco personas murieron ejecutadas en una casa, lo mismo ocurrió el 10 y 12 de junio en Puebla y Oaxaca. Los legisladores mexicanos condenaron estos hechos.
Según un recuento de víctimas a nivel nacional que hizo el Diario Milenio, el pasado mes de julio fue el más violento desde marzo del 2013 con 1054 homicidios. Senadores piden que se revise la estrategia de seguridad del Gobierno contra el crimen organizado.
Otro estado donde la violencia no se ha podido erradicar es Michoacán, solo en lo que va de este 2016, se han registrado 464 asesinatos, según las cifras del diario de Circulación Nacional.
El pasado mes de julio fue uno de los más violentos del 2016, y quizá de toda la Administración del presidente Enrique Peña Nieto, por tal motivo los senadores piden que se modifique la estrategia contra el crimen organizado ya que hasta el momento no ha dado los resultados que se esperaban desde hace cuatro años.
Arturo Calvillo, Ciudad de México.
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