"Si alguien cree que Irak es débil, se equivoca. Irak, con su pueblo y etnias, es poderoso, y defenderá su soberanía y seguridad. Demandamos a Turquía que revise sus posturas y saque de inmediato sus fuerzas de Irak", ha dicho este sábado el líder de la Coalición Nacional y presidente de la Asamblea Suprema Islámica de Irak, Seyed Amar al-Hakim.
En esta misma línea, Al-Hakim aduce que los iraquíes ya no pueden soportar las tensiones creadas por Turquía y las declaraciones de sus autoridades.
Si alguien cree que Irak es débil, se equivoca. Irak, con su pueblo y etnias, es poderoso, y defenderá su soberanía y seguridad. Demandamos a Turquía que revise sus posturas y saque de inmediato sus fuerzas de Irak", ha dicho el líder de la Coalición Nacional y el presidente de la Asamblea Suprema Islámica de Irak, Seyed Amar al-Hakim.
Así pues, dirigiéndose a las autoridades de Turquía, el presidente de la Asamblea Suprema Islámica de Irak ha subrayado que su país, y nadie más, decidirá quién participará y quién no en la batalla para la liberación de Mosul, principal bastión del grupo terrorista del EIIL (Daesh, en árabe).
Aun cuando el Gobierno iraquí y el Parlamento, además de autoridades y personalidades del país, han condenado repetidamente el despliegue de tropas turcas en el norte de Irak y exigido su retirada inmediata, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, insiste en que las Fuerzas Armadas turcas deben participar en la liberación de la ciudad de Mosul, sita en el norte de Irak.
Erdogan aduce al respecto que en la liberación de Mosul deberían participar únicamente aquellos grupos con lazos étnicos y religiosos con la ciudad.
Los Gobiernos de Irak y Turquía viven momentos de extrema tensión. El jueves, Irak se refirió a los militares turcos desplegados en la base de Bashiqa como a “ocupantes”, e hizo una petición al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) para tratar lo que consideran “violaciones de Turquía en el territorio iraquí e interferencias en los asuntos internos de Irak”.
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