El presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, ha informado este lunes de la decisión de presentar cargos contra los cuerpos policiales del Estado español por la violencia ejercida contra los catalanes ayer domingo durante la celebración del referéndum separatista.
“El momento aconseja mediación, y debe ser internacional. Hay que poner fin a la violencia judicial y a las restricciones de libertad. No dejaremos de insistir en lo que ya es un clamor”, ha dicho Puigdemont en una rueda de prensa tras la reunión del Govern.
Del mismo modo, ha anunciado la creación de una comisión de investigación sobre las “actuaciones impropias de las supuestas fuerzas del orden” y la brutalidad ejercida por la Guardia Civil y la Policía Nacional el día de la consulta soberanista.
El presidente de la Generalitat catalana ha rechazado las declaraciones que cuestionan la validez del referéndum y ha descartado que para la jornada del hoy se conozcan los resultados definitivos de la votación.
Además, ha confirmado que en estos momentos no hay diálogo o contacto alguno entre el Gobierno de Madrid y la Generalitat y ha atribuido este hecho al no reconocimiento del Gobierno central de que hay un problema que necesita ser resuelto.
El momento aconseja mediación, y debe ser internacional. Hay que poner fin a la violencia judicial y a las restricciones de libertad. No dejaremos de insistir en lo que ya es un clamor”, dice el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.
“Un error de base es el no reconocimiento del problema. Si no reconocen que es un problema político, ¿qué incentivos tienen?”, ha manifestado.
Las cargas policiales dejaron el domingo 844 personas atendidas por los servicios sanitarios, según datos difundidos por el Sistema de Emergencias Médicas de la Generalitat (SEM), dos de ellas hospitalizadas en estado más grave: se trata del hombre herido en un ojo con una pelota de goma y otro que ha sufrido un infarto en el desalojo de un centro de votación.
La represión masiva de los catalanes ha generado duras críticas. El expresidente catalán Artur Mas, cuyo Gobierno organizó un simbólico referéndum de independencia hace tres años, también pidió la renuncia del jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, añadiendo que Cataluña no podría permanecer junto a “un Estado que utiliza bastones y brutalidad policial”.
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