La campaña propalestina apoyada por la baronesa Jenny Tonge, un miembro del partido británico de centro-izquierda Liberal Demócrata en la Cámara de los Lores, ha llamado al Ejecutivo inglés a disculparse oficialmente con el pueblo palestino y asumir su responsabilidad por la llamada Declaración de Balfour, documento que permitió hace un siglo que se creara un “hogar nacional” judío en suelo palestino, publicaron el martes los medios británicos.
En esta misma línea, los activistas, respaldados también, por la misión diplomática palestina en el Reino Unido, quieren presentar una petición formal ante el Parlamento británico, la cual de alcanzar 100.000 firmas, obligará al órgano legislativo inglés a considerar debatir el tema.
Fue el 2 de noviembre de 1917 cuando el entonces secretario británico de Asuntos Exteriores, Arthur Balfour, escribió un breve comunicado y se lo envió a Walter Rothschild, un líder del movimiento sionista, otorgando el apoyo explícito de Londres al establecimiento de un “hogar nacional” judío en Palestina.
El pasado martes la baronesa Tonge organizó un evento propalestino en Westminster, en el que los participantes culparon a la Declaración de Balfour y al colonialismo británico en el Oriente Medio por la difícil situación que vive el pueblo palestino desde hace décadas.
Los lobbies sionistas en el Reino Unido y funcionarios israelíes arremetieron contra el evento y la misma Tonge, a la que acusaron de antisemitismo, tras publicarse un video mostrando que un miembro de la audiencia dijo que comparó a Israel con el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe).
"Igual que el llamado estado judío en Palestina no proviene del judaísmo, el Estado Islámico (EIIL) en Siria no tiene nada que ver con el Islam. El sionismo es una perversión del judaísmo", dijo el hombre no identificado.
Por las presiones de los funcionarios israelíes, Tonge fue suspendida el jueves del partido Liberal Demócrata, y fue expuesta a una investigación sobre el evento. Después de su suspensión Tonge escribió en Facebook: “Por fin me he librado de que me digan lo que debo y no debo decir sobre la cuestión de Palestina, para no ofender al lobby de Israel aquí, al que le gusta controlarnos, como hace en EE.UU.”.
Por su parte, el presidente palestino, Mahmud Abás, de visita en Nueva York (EE.UU.) la semana pasada pidió al Reino Unido que se disculpe por la Declaración de Balfour, y asumir su responsabilidad por las “catástrofes, la miseria y la injusticia que esta declaración creó y actuar para rectificar estos desastres y remediar sus consecuencias, incluso mediante el reconocimiento del Estado de Palestina”.
No obstante, un vocero de la Oficina de Relaciones Exteriores y la Commonwealth en el Reino Unido ha respondido, asegurando que Londres jamás se disculpará por esa declaración.
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