“Daesh no tuvo más remedio que someterse a nosotros y aceptar nuestras condiciones porque se habían derrumbado desde dentro”, ha declarado este lunes el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasrolá, en un discurso televisado.
Nasrolá ha hecho estas declaraciones en la misma jornada en que cientos de terroristas del grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) han comenzado a huir de la estratégica región siria de Al-Qalamun, cerca de la frontera con El Líbano.
El máximo dirigente de Hezbolá ha asegurado que, tras el anuncio de la rendición de los extremistas takfiríes en Al-Qalamun, ya no queda presencia alguna de elementos radicales en las colinas y montañas de esta área fronteriza.
Durante los últimos veinticinco años, Hezbolá ha expulsado de las tierras libanesas a las fuerzas invasoras del régimen israelí, ha recordado Nasrolá para luego precisar que el Movimiento ha hecho lo mismo respecto a los terroristas de Daesh.
Daesh no tuvo más remedio que someterse a nosotros y aceptar nuestras condiciones porque se habían derrumbado desde dentro”, declara el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasrolá.
Nasrolá explica que la aparición de Daesh y de otros grupos extremistas en la frontera de Siria con El Líbano está en línea con los deseos de EE.UU., cuyo Gobierno asiste financiero y logísticamente a todos los extremistas que operan en la región, para usar a los terroristas como instrumentos en la consecución de los planes bélicos del régimen de Tel Aviv.
“Desde que los terroristas están presentes en Oriente Medio, sus actos violentos ni una sola vez se han dirigido hacia Israel”, indica el líder de la Resistencia.
Por eso, las recientes victorias logradas de las fuerzas gubernamentales y sus afines ante los terroristas en Siria y El Líbano son motivo de tristeza para sus patrocinadores estadounidenses e israelíes, agrega Nasrolá.
Además, afirma que las operaciones antiterroristas en marcha, erradicarán en breve la presencia de los miembros de Daesh de El Líbano, así como no existen rastro alguno del grupo terrorista Frente Al-Nusra (autoproclamado como Frente Fath Al-Sham).
El Gobierno sirio aceptó un acuerdo entre Hezbolá y Daesh para la entrada en vigor de un alto el fuego en la frontera sirio-libanesa, el cual ha posibilitado la evacuación de unos 200 terroristas de Al-Qalamun occidental (Siria), Al-Qaa y Ras Baalbek (El Líbano).
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