"Los combatientes de Hezbolá no solo prestan apoyo militar a las fuerzas sirias en su lucha contra el terrorismo, sino que participan en los combates en Irak y adoptan las medidas adecuadas para afianzar la seguridad de El Líbano", ha afirmado este viernes el secretario general del Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasrolá.
El dirigente libanés ha hecho estas declaraciones en un discurso televisado para marcar los cuarenta días transcurridos desde la muerte del comandante de Hezbolá Mostafa Badr al-Din a manos de grupos takfiríes en Siria.
Los combatientes de Hezbolá no solo prestan apoyo militar a las fuerzas sirias en su lucha contra el terrorismo, sino que participan en los combates en Irak y adoptan las medidas adecuadas para afianzar la seguridad de El Líbano", ha afirmado este viernes el secretario general del Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasrolá.
Asimismo, ha denunciado que Turquía y Arabia Saudí, que en los últimos meses han facilitado la entrada de miles de terroristas extremistas a Siria, han fracasado en su plan para derrocar al Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad.
Las fuerzas de Hezbolá, ha añadido, se están enfrentando a "un proyecto estadounidense-saudí-takfirí que amenaza a toda la región".
Por otra parte, Nasrolá ha calificado de “mentiras” los informes de medios árabes según los cuales, los combatientes de Hezbolá estuvieron a punto de ser derrotados en la ciudad siria de Alepo, agregando que solo en el mes de junio más de 600 terroristas murieron y unos 80 tanques y vehículos militares pertenecientes a las bandas extremistas fueron destruidos en operaciones conjuntas con las Fuerzas Armadas sirias.
También ha prometido que los compañeros del comandante asesinado de Hezbolá continuarán su resistencia inquebrantable contra los terroristas del grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) y otros grupos extremistas en la región.
Nasrolá ha asegurado que los terroristas takfiríes como Daesh y Frente Al-Nusra, rama de Al-Qaeda en Siria, serán derrotados y enterrados en suelo sirio, y ha añadido que la batalla de Alepo es crucial para determinar la dirección del conflicto en Siria.
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