"No me gusta. No quiero esa comparación (…) es una comparación terrible", ha dicho Trump en una entrevista con la cadena estadounidense ABC News. Si bien añade que no sabe quién o quiénes lo han comparado con Hitler.
Este mismo martes el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, además de condenar las posturas racistas y xenófobas del multimillonario norteamericano, lo ha comparado con Hitler y advierte de que sus declaraciones “lastiman” las relaciones bilaterales.
"No me gusta. No quiero esa comparación (…) es una comparación terrible", ha dicho el precandidato republicano Donald Trump.
No es la primera vez que a Trump lo equiparan con Hitler: varios analistas han señalado el hecho de que el precandidato republicano, en sus eventos y marchas, pide a los asistentes realizar un saludo casi idéntico al saludo nazi, supuestamente para que juren que votarán por él.
El magnate estadounidense, por su parte, ha considerado que podría bajar el tono para que no se produzcan comparaciones similares, pero recuerda que goza de gran apoyo, lo que, a su juicio, muestra que gran parte de la sociedad norteamericana comparte sus puntos de vista.
También ha arremetido contra los altos responsables del Partido Republicano por tratar de bloquear su candidatura y apoyar a sus contrincantes para sacarlo de la carrera presidencial.
“Claramente no me quieren ver [como su candidato republicano]”, ha dicho, asegurando que ni sus presiones impedirán que sea el candidato del Partido Republicano.
Desde el inicio de su campaña presidencial Trump ha provocado controversia a nivel nacional e internacional con sus declaraciones racistas, dirigidas en su gran mayoría contra las minorías, en particular latinos y musulmanes.
No obstante, Trump sigue siendo el precandidato con más apoyo a nivel nacional y es altamente probable que llegue a ser el representante del Partido Republicano en las elecciones presidenciales de EE.UU. que se celebrarán en noviembre de 2016, e incluso cabe que gane esos comicios.
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